La marca The North Face se creó en 1966, en una playa de San Francisco, en Estados Unidos. Empezó como una pequeña tienda de material de montañismo, pero rápidamente creció y empezó a cubrir otros tipos de deportes extremos, como el esquí. También empezaron a elaborar sus propios productos y a invertir cada vez más en su calidad e innovación. Con el tiempo se ha convertido en una de las marcas de ropa deportiva más reconocidas. Siendo una marca centrada en el descubrimiento de la naturaleza, tiene todo el sentido del mundo que The North Face se esfuerce por protegerla, evitando los residuos e invirtiendo en la sostenibilidad. La marca se preocupa en reciclar el material que ya no se utiliza para la producción de nuevas piezas, además de mantener una estrecha relación con todos los proveedores, garantizando la calidad y la sostenibilidad de todos los materiales utilizados.